Luis Andrés Serrano Vintimilla: "Los ORL no deben hacer audiología"

Como cada dos años, la AsociaciónColombiana de Audiología llevó acabo el Congreso Internacional enAudiología, que este año celebró sudécima primera edición entre el 14 y17 febrero en Bogotá, la capital colombiana,tiempo durante el cual se ha posicionado enla región latinoamericana y se ha convertido en referentepara profesionales de la región que viajan a Colombiaexclusivamente para el evento.

Publicado el 18 mayo 2018

Luis Andrés Serrano Vintimilla: “Los ORL no deben hacer audiología”

Más de 150 personas llegaron a la ciudad para escucharde viva voz a tres expertos internacionales que generaronmucha expectativa: Christopher Halpin, James Hall yLuis Andrés Serrano, todos doctores en audiología, los dos primeros estadounidenses y el último, ecuatoriano.Audioenportada los entrevistó en exclusiva y cada uno tuvola oportunidad de referirse a su trabajo. Presentamos aquí uno de estos testimonios y les invitamos a leer el resto en el número 62 de Audio Infos.

“Los ORL no deben hacer audiología”

Para el especialista ecuatoriano la precisión de losdiagnósticos depende en gran parte del especialista,por ello defiende cabalmente el papel de los audiólogos.Serrano atiende temas relacionados con la niñez,específicamente casos de microtia, síndrome deDown y paladar hendido. De estas patologías, el temade microtia ha traspasado las fronteras, pues es unproblema de salud pública en Latinoamérica y si bienEcuador ocupa el primer lugar en el mundo, tambiénse ven afectados Perú, Bolivia y México, entre otrospaíses de la región.

 

“Tenemos un programa sobre evaluación de microtiasque nació hace cinco años en Ecuador y nos ha permitidoimplementar medidas eficientes para atenderoportunamente a esta población”, dice el experto,quien asegura que han tenido que concientizar a losprofesionales en el diagnóstico y, especialmente, aaudiólogos y fonoaudiólogos en los conceptos audiológicosque deben aplicarse a niños con microtia, queno son iguales comparados con otrosproblemas de hipoacusia en menoressin esta patología.

Hoy en Ecuador se lleva a cabo elprograma de screening auditivo conequipos de última tecnología en todoslos hospitales de primer y segundonivel; a la fonoaudiología se le dio suimportancia y los otorrinolaringólogosdejaron de hacer audiología, todo estoha hecho que Ecuador se potencialicey ahora no hay niños “sordomudos”.Los chicos con deficiencias auditivasvan integrados a escuelas, ya no sehacen diagnósticos a los 12 años sinoantes de los dos años de vida y todoesto se debe a un mejor manejo dela audiología.

El reto que les quedaba era el seguimiento,pero el grupo del doctorSerrano se dio a la tarea de alertar sobre todo sobre los factores de riesgo, un problema que aúntiene cabos sueltos porque no siempre estos niños seremiten a programas continuos. Por ejemplo, según elespecialista, todos los niños con síndrome de Down enalgún momento de su vida tendrán problemas auditivos;y aquellos con paladar hendido generalmente tienenpérdida de audición.

Actualmente, el galeno cuenta con más de 1.200casos de microtia documentados en América Latinay “estamos estudiando su origen. Hay una razón, sinduda, que es la altura, pero también vamos a analizarla parte genética y para ello nos unimos con un equipode especialistas de Harvard, Estados Unidos, con elcual nos encontramos obteniendo muestras de unas100 familias con microtia de Perú, México y Bolivia.Este trabajo nos puede dar la respuesta que estamosbuscando, hasta ahora hemos encontrado que la relacióngenética no es padre e hijo, sino que se presenta entreprimos del mismo nivel, cuyos padres son hermanos yson sanos, es una relación horizontal”, explica.

Este programa sobre microtia liderado por el doctorSerrano trata el problema como tal -independiente dela parte estética- y será implementado próximamenteen Costa Rica, Honduras, Argentina y Chile.

Lea este artículo completo en el número 62 de Audio Infos América Latina, disponible en nuestra biblioteca digital. (Flipbook de acceso gratuito).

M.B.P.

Fotos: M.B.P..